Enero enmarca muchas cosas diferentes. Propósitos de año nuevo que no arrancamos a cumplir, dietas que parecen imposibles, la cuesta de enero, las noticias sanitarias que nos acompañan durante los últimos meses… El llamado Blue Monday (el día más triste del año) está más que justificado, y nosotros os preguntamos… ¿no os apetece comer algo dulce cuando estáis tristes? ¡Todo eso tiene una explicación!
La ciencia habla
Por todos es sabido que, a la hora de hacer dieta, el dulce es a lo que más nos cuesta renunciar. Esto no es solo una cuestión de caprichos, se debe a que el organismo tiene especial capacidad para reconocer los azúcares y siente debilidad por este sabor. ¿Por qué nuestro cuerpo tiene necesidad de dulce? Hay dos motivos:
- Ese sabor nos ayuda a identificar fuentes de energía seguras y rápidas, y el cuerpo reacciona positivamente por un puro instinto de supervivencia
- Nuestro cerebro está diseñado para responder con sensaciones de placer cuando comemos algo dulce
Los mecanismos que nos hacen desear una comida en concreto (en este caso, el dulce) usan sistemas de recompensa que segregan dopamina, serotonina y noradrenalina, todas ligadas al bienestar. Pero no es la sustancia en sí lo que es adictivo, sino lo que nuestro cerebro hace con la señal que produce esa sustancia.
El punto de vista social del dulce
Si la explicación científica no os resulta lo suficientemente convincente, os proponemos un pequeño ejercicio de memoria. Pensad en un momento alegre o de celebración donde no intervenga el sabor dulce.
Tartas de cumpleaños, turrones en navidad, tarta nupcial… y yendo a escalas pequeñas tenemos ese caramelo que os daban vuestros abuelos, esa bolsa de gominolas que nos regalaban al portarnos bien o esa bandeja de galletas con chocolate que prepara la vecina.
El dulce es, socialmente, algo ligado a lo familiar, a las fiestas, a la amistad, a las celebraciones, a lo divertido… ¿y qué produce más gustito que eso?
Como conclusión, desde Pastelería Ramos os animamos a hacer todo lo que os haga felices, ¡siempre y cuando se haga con moderación! Y recordad que, si tenéis antojo de dulce durante el Blue Monday o cualquier otro día, es preferible saciarlo con nuestros productos naturales y recetas tradicionales, ¡siempre tenemos lo mejor para vosotros! 🙂
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